Para mi hace como meses que no escribo nada, no porque no tenga nada que contar o nada que enseñar pero hay veces que la vida cambia y no siempre para mal. Los cambios de casa habitual cambia tu cerebro y por consecuencia cambias, por ejemplo ya no eres capaz de andar a oscuras, no recuerdas donde están las cosas, te sientes un poco incomodo con tu despacho, te rodeas de cajas como si fuera un almacén. Pero poco a poco todo va volviendo a esa normalidad, asentándose en tu cerebro, haciéndote sentir que esta es tu casa, que este es tu hogar, te relajas y te dejas llevar viéndote como podrías pasar casi el resto de tu vida en esa casa.
Tal vez el blog siga estando en el mismo sitio, pero yo no lo estoy. Pero por mucho tiempo que pase este blog sigue siendo mi casa y mi ventana al mundo, tanto para que me vean como para mirar.
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| Gaviota de Audouin. |
Aun así aun tengo ganas se seguir viviendo aventuras como un pez de tierra y mostrar ese pedacito de mi vida. Que paseis un feliz verano.
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